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| Las lectoras voluntarias |
El viernes por la tarde Dickens estuvo presente en las clases de 5º y 6º a través de las voces del grupo Leer Juntos, formado por algunas madres del colegio. Ellas se encargaron de trasladar a nuestros niños y niñas de hoy a aquellas calles londineses de dos siglos atrás donde la injusticia siocial y el abandono de los más indefensos estaban a la orden del día, situaciones que el autor no sólo describió de manera magistral sino que denunció y se encargó de impulsar medidas que las paliaran. Fue admirable la atención que consiguieron captar de un auditorio más familiarizado con el mundo audiovisual y la acción que con la oralidad y la descripción, una prueba más de que los buenos autores encajan perfectamente con la modernidad y con la tecnología; por eso los llamamos clásicos, porque nunca pasan de moda. Para la ocasión, seleccionaron pasajes de
Oliver Twist y
Canción de Navidad. Que sirva esta reseña como agradecimiento público a su colaboración en la tarea de extender la pasión por la lectura entre nuestros alumnos y alumnas.
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| Atento auditorio |
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| Más lectoras |
Pero Dickens también ha estado presente en otros eventos de nuestra ciudad esta misma semana, ayer sábado por la tarde un grupo de profesores de los Departamentos de Filología Inglesa y Alemana de la Universidad de Zaragoza presentaron en el Salón de Actos de la CAI del Pº Independencia, una lectura dramatizada del cuento Canción de Navidad, con un delicioso montaje en el que se combinaba la lectura del cuento con la proyección de ilustraciones de ediciones antiguas y actuaciones musicales del grupo Celtic Airs interpretando villancicos tradicionales de Inglaterra e Irlanda. El acto estuvo contó también con una breve introducción a la Inglaterra de hace 200 años, los mismos que hubiera cumplido Dickens en este 2012. En el acto se recordó que aquella Inglaterra victoriana estaba viviendo el auge del crecimiento de la ciudad de Londres, del abandono del campo y de la aparición de personajes como
Malthus y
Adam Smith. El primero, pronosticando la superpoblación y recomendando en sus obras que no deberían darse subsidios sociales a los pobres, especialmente a los no productivos; el segundo, enunciando las teorías liberales que fundamentaban el nacimiento de la Economía como ciencia, recomendando que el capital estuviera en mano de los inversores y que los trabajadores cobraran unos salarios mínimos que bastaran para su subsistencia ... Ideas de hace doscientos años que al público asistente a esta lectura nos resultaban terroríficamente actuales y que desgraciamente ponen la obra dickensiana de plena actualidad.
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